Tal y como dijimos en nuestra IX Jornada, la Inteligencia Artificial no sustituirá al profesional sanitario. Será más bien un «multiplicador de fuerzas», que permite dar una mejor atención sanitaria con los mismos recursos. El uso de la IA en emergencias médicas ya es una realidad, y supone, en opinión de los médicos, un cambio revolucionario.
Aplicación de la IA en emergencias médicas
La Inteligencia Artificial está revolucionando la forma en que los equipos de emergencias responden a embolismos pulmonares, aneurisma aórtico o embolias y otros accidentes. Su aplicación da a los profesionales médicos acceso inmediato a imágenes, información de pacientes y comunicación con los miembros del equipo médico. Existen ya diversos modelos de IA aprobados por las autoridades sanitarias estadounidenses (FDA). Estos pueden monitorizar de forma independiente imágenes de TAC, identificar el problema y alertar a los miembros del equipo sanitario en sus móviles. Las alertas notifican a los médicos de casos inminentes, con enlaces a la información del paciente y acceso inmediato a las imágenes del TAC. Esto sucede antes de que dichas imágenes lleguen a un radiólogo, lo cual acelera la activación del equipo médico, y por tanto la respuesta, mejorando así la supervivencia del paciente.
Estos algoritmos de IA, en un principio diseñados para ayudar a los radiólogos, en la práctica están siendo empleados mucho más por equipos de cuidados intensivos para embolismos pulmonares y embolias. Aunque la tecnología fue implementada en un principio para detectar embolias, los médicos también la aplican a embolismo pulmonar. Su implementación, comentan los expertos, «ha sido revolucionaria,» pues permite a los médicos tomar decisiones a tiempo y evitar pasar por alto casos críticos.
Información y coordinación acelerada
La comunicación instantánea garantiza información y coordinación sin demora de la respuesta, muchas veces antes de que el departamento de urgencias les alerte. Este enfoque proactivo, comentan los expertos, «nos permite intervenir más pronto, lo cual es crucial dada la gran carga de trabajo de las salas de urgencias hoy día». De igual modo, la tecnología juega un papel fundamental en los ensayos clínicos. Gracias a la IA, los coordinadores de estudios pueden cribar la elegibilidad de cada caso de embolismo pulmonar, lo cual supone «una mejora significativa» de su capacidad de estudiar y aplicar opciones de tratamiento.
Mejorar criterios de tratamiento urgente
Gracias a estos algoritmos, es posible identificar con rapidez los casos de mayor riesgo en base a sus cambios fisiológicos o hemodinámicos, como baja presión arterial o taquicardias, que podrían requerir intervención inmediata. La IA, además, asiste en la evaluación automatizada de la presión del ventrículo derecho por medio de imágenes. También presenta sus mediciones y la forma en que han sido realizadas. Esta información, afirman los profesionales médicos, tiene un impacto inmediato sobre las opciones de tratamiento.
Los equipos de emergencias están adoptando esta tecnología porque combina vigilancia automatizada las 24 horas del día, cribado inicial de pacientes, envía alertas, enlaza con todos los datos relevantes de pacientes, y además proporciona una plataforma de mensajería a los equipos médicos. Todo esto incrementa la eficiencia y reduce el tiempo de tratamiento. La conectividad y la capacidad de proporcionar consejo experto, concluyen los expertos, «ha cambiado totalmente» la atención médica.
La adopción de esta tecnología, permite elevar los estándares de atención médica de un modo universal. El éxito de esta IA indica el potencial de una adopción generalizada y estandarización de prácticas de cuidado avanzado. Además, estos sistemas incluyen un sistema que pone en contacto a los profesionales de grandes centros médicos con los que hospitales de menor entidad, con menos recursos. Esto incluye el envío de equipos de emergencia a estos centros menores, o transferir a dicho paciente a un centro donde pueda recibir asistencia urgente.