La Inteligencia Artificial en salud ha entrado en un nuevo ciclo de grandes oportunidades, gracias a los avances en aprendizaje profundo (deep learning). Todo apunta a que 2025 puede ser un año decisivo. Sin embargo, es necesario garantizar que esta tecnología tenga un uso seguro, efectivo y equitativo. Como vimos en nuestra reciente jornada, «La IA nos va a impulsar hacia adelante, pero la sabiduría garantiza que nos dirijamos en la dirección correcta». En este sentido, me gustaría comentar la hoja de ruta que propone la academia nacional de medicina de los EE UU a la nueva administración del país. Los puntos principales son:
Garantizar el uso seguro, efectivo y fiable de la IA
Las agencias federales «deberán desarrollar políticas que incentiven la aplicación equitativa y justa de las tecnologías de IA,» escriben los autores. Es más, «Es de critica importancia requerir o incentivar la inclusión de pacientes y usuarios finales en el desarrollo e implementación del ciclo de vida completo de la IA.»
Promover el desarrollo de una fuerza laboral formada en la IA
Los autores instan a los centros de educación superior «a considerar iniciativas que apoyen las sociedades profesionales, entidades de acreditación y colegios médicos en la implementación de nuevos requisitos formativos y la constante adaptación de los programas educativos, a fin de preparar a los sanitarios para la aplicación de la IA en el cuidado del paciente.» Igualmente, las autoridades «deberían incentivar a las organizaciones de formación médica a realizar controles regulares de conocimientos y habilidades, para identificar aquellas que comiencen a ser redundantes a causa de los avances en IA sanitaria.»
Apoyar la investigación de la IA en salud y atención sanitaria
Invertir en investigación en la atención sanitaria puede incrementar el papel de las tecnologías de IA en la medicina de precisión. «Se debería investigar», subrayan los autores del documento, «cómo, cuándo y dónde utilizar la IA para aplicar tratamientos personalizados a cada paciente, en base a las características, genética, hábitos de vida y exposición a factores ambientales.» Esto tiene «amplias implicaciones» para el concepto de «estándares de tratamiento». Tal vez sea necesario cambiar su definición o evaluación para encajar con el concepto de cuidado personalizado.
Definir responsabilidades y obligaciones en el uso de IA
Los responsables «deberán apoyar y coordinar los trabajos de las sociedades profesionales para agilizar la adopción responsable de la IA médica, mediante la delimitación de las responsabilidades y obligaciones de los profesionales sanitarios». En este sentido, proponen tres acciones a implementar:
- Analizar las cuestiones jurídicas más comunes a fin de determinar qué necesitan saber los médicos y los hospitales, y qué aspectos del uso de la IA siguen todavía indefinidos.
- Promulgar modelos de condiciones de licencia para la IA médica que puedan crear normas de responsabilidad más claras a través de contratos.
- Establecer las condiciones para indemnizaciones o seguros contra lesiones relacionadas con la IA.
El documento donde se detalla la hoja de ruta de la academia nacional de medicina de los EE UU está disponible en el siguiente enlace.